TUS POEMAS

TUS POEMAS

Cuando leo tus poemas

Me gusta lo que imaginas,

Aparezco en los renglones

Donde todo lo adivinas.

Tu pluma sutil

Va recorriendo las hojas

Impregnando a su paso

El olor de tu jardín.

No me escribas tantas cosas,

No quiero que a mis mejillas

Le afloren tantos colores

Porque tu lápiz lo diga.

Tus poesías diarias

Dices que a muchos les llena,

Con tanto amor derramado

Cuantos se ven reflejados.

La ilusión que describes

Y los temores cuando crecen,

Ayudan a tus lectores

A no tropezar dos veces.

Escribes y te reconforta,

Te leen y no les importa

Esperar a que escribas

Porque mucho les aportas.

AL CALOR DEL AMOR

AL CALOR DEL AMOR

Tus labios entornados

Me esperan en la cama,

Aparentan olvidados

Hasta que los deje cerrados.

Con un leve recorrido

Pasean tu geografía

Mis manos, cada noche,

Y siempre que me lo pidas.

Subiendo voy bajando,

Y bajando voy subiendo,

Cuando los cuerpos se cruzan

Y la imaginación va creciendo.

Aparece la alborada

En esta noche cerrada,

Que nos sorprende abrazados

Y con nuestros labios pegados

EL ARMAZON

EL ARMAZON

Los amargos despertares

Pasados por el dolor,

Oscurecieron mis ilusiones

Cuando devolviste mi amor.

Torpe y atolondrado

Demasiado castigado,

A los pies de tu luna

Mi estrella has apagado.

Que tristes mis sueños,

Que áspero el camino,

Mi llanto arrancaba

Mientras la angustia duraba.

Brotará mi alegría

Porque aguantó mi armazón,

Y el día menos pensado

Borrará mi desazón.

Frente a mi luna llena

Que alumbra mi corazón,

Esperará a que mi amor rebose

Hasta que brille mi estrella.

Encontraré otro puente

Por el que pueda pasar,

Que me lleve a un nuevo sueño

Y con ella poder soñar.

LA BALANZA

LA BALANZA

¿Cómo encontrar el momento

De pedirte algo más

Saliendo de tarde en tarde

Y al cine cuando te vas?.

Calado estoy de sudor,

Empañadas tengo las gafas,

Pensando en ese momento

Por si lo que te pido, rechazas.

Paradojas de la vida,

Cuando tú estabas por mí

Siendo más jovencita,

Yo no lo estaba por ti.

La vida buscará equilibrar

Anhelos y dificultades,

Y con su balanza pesará

Si los sentimientos son iguales.

MOLINOS DE VIENTO

MOLINOS DE VIENTO

Como indicar el camino

A nuestros niños mayores,

Solo existe blanco y negro

Donde los demás vemos colores.

Hay que soportar

Vientos y marejadas

Con besos firmando paces,

Un huracán nos esperaba.

Sin armas para luchar

Contra molinos de viento,

Sus aspas sin miramiento

Nos harán descabalgar.

¿Cuántos santos pasean

Y salen en procesión?

Cuando llevamos la contraria

Y entramos en discusión.

Con la noche y madrugada

Algo de calma se siente,

Con los oídos abiertos

Y nuestros cuerpos ausentes.

Se empieza a vestir el sol,

Ya comienza un nuevo día

Esperando que la razón

Entre en su habitación.

FUTURO PERDIDO

FUTURO PERDIDO

Corres buscando el destino

Y el futuro que imaginaste

Sin llegar a pensar

Que ya te pasó por delante.

La juventud no revive

Y mucho viste pasar,

Por tanto querer correr

La dejaste muy atrás.

Ya tu padre no subió al tren

Y su destino quedó en el andén.

A su experiencia no atendías

Porque todo lo sabías.

Tus ojos estaban ciegos

Y tus oídos cerrados,

A nadie quisiste escuchar

Hasta perder lo buscado.

¡Cuántas veces has soñado

Con tu  futuro imaginado!.

Ahora tendrás que reflotar

Aprendiendo a saber escuchar.

Aunque la vida guarda un lugar

Para los que corren sin pensar.

MI RELOJ DE ARENA

MI RELOJ DE ARENA

Mi reloj es de arena,

El tuyo de pulsera,

Yo veo caer las penas

Y tú vas a quien te espera.

Las palabras no hablan

Por mucho que estén escritas,

Sabiendo lo que iba a pasar

Bien las pudiste borrar.

Mi amor fue sincero,

Pero no te pudo llenar,

Aunque llegué el primero

No supe saber llegar.

Le di la vuelta al reloj,

Y se acabaron mis penas

Viendo pasar un nuevo amor

Entre sus granos de arena.

No busqué los atajos

Para llegar el primero,

Ni corté la maleza

Para saber llegar,

Solo tuve que esperar

A que la vida me lo diera.

Ahora sé cómo llenar

Este amor sobre la arena.

EL PUZLE

Voy poniendo piezas

Para que nuestro puzle encaje,

Con una sola que pierda

Puede hacer que todo cambie.

A cuanto he renunciado

Por tenerte tan cerca,

Con el puzle completado

Quedará todo ajustado.

Mi corazón de hierro

Ya lo tienes doblegado,

Se lo que estás pensando

Porque ya estoy levitando.

Por encima de las nubes

Tú me coges de la mano,

Quieres que mis pies toquen suelo,

Necesitas decirme algo.

Amo al hombre que sueño,

Sueño al hombre que deseo,

Deseo al hombre que quiero,

Y quiero al hombre que tengo,

Tú

ASALTAR AL AMOR

ASALTAR AL AMOR

La estela de tu perfume

Y tus labios carmesí

Son suficiente equipaje

Para viajar tras de ti.

Coquetería refinada,

Tacones y complementos,

La primavera besabas

Con tus cabellos al viento.

No quiero ser desmedido

Pero estoy enamorado,

Cuando me acerco a tu lado

No tienes tu corazón cerrado.

La víspera a tu asalto

Voy perfilando estrategias,

Seguro estoy que lo esperas,

No quiero que corra tu espanto,

Mi ascua tengo encendida

Por si falla el abordaje,

Quiero tener viva la llama

Para buscar otro equipaje.

EL NIÑO Y SU MUNDO

EL NIÑO Y SU MUNDO

Conocí a un niño muy pobre

Andando por la montaña,

Sucio y destartalado

Su historia me contaba.

No tenía luz ni agua,

Ni espejo en el que mirarse,

Y cuando se levantaba del catre

A nadie veía asomarse.

Con paraguas boca arriba

Y cubos desperdigados

El agua recogía,

Y con el cazo calentaba

Lo que algún caminante le daba.

Le dije ¡qué locura!,

Cuando me contó

Que si el agua le sorprendía

Bebía de las huellas

Que dejaba marcadas su mula.

Un cura, a veces, se acercaba

Que con poco lo alegraba,

Le “limpiaba” su alma

Y un saquito le dejaba.

Lo he visto con mis ojos

El chamizo en el que vive,

No se acerca televisión,

Y en otros medios

Le dan poca conversación.

Existe la España profunda,

Sus días no tienen nombre,

Sus años no tienen días,

Y aquí siguen olvidados,

¡O quizás globalizados!.

EL ASILO

EL ASILO

Acompañe a un amigo

A visitar a su madre al asilo.

No me gustó el panorama,

Tuve la sensación

De estar en la última estación.

En la sala de estar,

Y andando por los pasillos

Veo que no me ven,

Otros me lanzan besos,

Y algunos rejuvenecían

Sacando de los cajones

Sus viejas fotografías.

Hablo con dos personas

Que pocas palabras tienen,

Apoyadas en las garrotas

Van soltando palabrotas.

Muchos tienen dolores

Que con el paso del tiempo

Les han hecho rezadores.

¡Cuántos hay sentados

Que llevan años olvidados!

Con sus cabezas perdidas

Y mirando a ningún lado.

Hay quienes no pueden a la vez

Con las protestas y su invalidez.

Noto, que al llegar la noche,

Se levanta el silencio,

Y con su largo paseo

Les envuelve de miedo.

Se oyen algunos quejidos,

No puedo evitar

Que de mi alma

Brote alguna lágrima.

Siento con esta venida

Que todo huele a despedida.

Merodea la muerte

Que esperará recaudar

Cuando vea sus ojos cerrar.

LA PRISIÓN

LA PRISION

Entre ocho metros cuadrados

Dentro de la prisión,

Veinte años me han tocado

Por jugar con la ambición.

Estrecho y encasillado

Un número me han dado,

Que han grabado en mi mente

Y mi nombre lo han guardado.

La paloma blanca

Ya no viene a la ventana

Con su ramita de olivo

Que cada día me aliviaba.

¡Dicen que rehabilita

El estar aquí encerrado!,

“de lo mejor de cada casa”

Todo el día rodeado.

No tengo mujer ni novia,

La tentación veo pasar,

El que baje de su noria

Yo ocuparé su lugar.

No vengas por cualquier cosa,

Entra por un gran trabajo,

A ver si por robar un gallo

Vas a ser mi vasallo.