NO LLEGA A
SER CONDENA
No deja de maullar tu gato
cuando no estás en casa,
porque dos vueltas de una llave
lo empujan a la terraza.
Manojos de infidelidad
y ser plato de segunda mesa
es lo que te ofrece sin piedad
quien te habla con palabras gruesas.
Cuando el vértigo se hace firme
y despuntan los sinsabores
son tus noches cuchilladas
y los días tus dolores.
Eres su punto de mira
y el principal objetivo,
eres su brote de ira
cuando él te señala bebido.
Y a los veinte años de matrimonio
pusiste fin a la pena,
no consientes pasar un día
para que no parezca condena.
cuando no estás en casa,
porque dos vueltas de una llave
lo empujan a la terraza.
Manojos de infidelidad
y ser plato de segunda mesa
es lo que te ofrece sin piedad
quien te habla con palabras gruesas.
Cuando el vértigo se hace firme
y despuntan los sinsabores
son tus noches cuchilladas
y los días tus dolores.
Eres su punto de mira
y el principal objetivo,
eres su brote de ira
cuando él te señala bebido.
Y a los veinte años de matrimonio
pusiste fin a la pena,
no consientes pasar un día
para que no parezca condena.
No hay comentarios:
Publicar un comentario